Azahara Muñoz no está firmado la mejor temporada de su carrera. No ha sido un año fácil. Decidió introducir algunos cambios en su trabajo el pasado invierno con el objetivo de recuperar la consistencia de antaño en su swing y, como siempre, los cambios tardan en asentarse. Sin embargo, la golfista de San Pedro de Alcántara es paciente, tiene mucha experiencia y ha sabido adaptarse a la situación en los momentos más complicados sabiendo que con su trabajo y calidad acabarían llegando los resultados. Y así está siendo...
Este sábado terminaba el Indy Women in Tech Championship, un torneo de nueva creación del LPGA Tour celebrado en Indianápolis y donde la golfista malagueña ha certificado el mejor resultado de la temporada. Azahara finalizó decimoquinta, yendo de menos a más y con la sensación de que si llega a tener una cuarta ronda el torneo bien podría haber acabado en el top ten.
Son unas noticias magníficas, ya que la jugadora andaluza está recuperando su mejor versión justo antes de viajar a Europa para disputar de manera consecutiva el Evian Championship, quinto y último Major de la temporada que empieza el próximo jueves, y el Open de España, que como todos saben se jugará en dos semanas en Guadalmina, la casa golfística de Azahara Muñoz, donde se formó como jugadora.
Además de Azahara, este pasado fin de semana en Indianápolis jugaron Belén Mozo, que pasó el corte y sigue luchando por mantener la tarjeta del LPGA para la próxima temporada, y María Parra, que falló el corte y de momento pone fin a la temporada americana. En principio, la joven y excepcional jugadora gaditana no tiene entrada para jugar más torneos en el LPGA, por lo que el siguiente paso será afrontar la temporada en Europa (por supuesto estará también en Guadalmina para el Open de España) y preparar la Escuela del LPGA para tratar de reconquistar la tarjeta.
Azahara Muñoz.
